martes, 4 de enero de 2011

Cap.10: Las niñas no saben tratar bien a las rosas.

Anteriormente, Luka había que tenido que atravesar un mar de dificultades antes de encontrarse finalmente con su prima Aiko.

-¡Aiko! - dije mientras me aproximaba.
-¿... Luka...? Me alegro... de que te estés bien.
-¿Que sucedió?- le pregunte
-Mmm... No lo recuerdo bien, lo ultimo que supe es que tenia unos escalofríos... y... luego... más nada.
-*Yoh: ¿mmm..? ¿Luka? ¿no era ella la que nombro Aiko antes de desmallarse?*
-Luka... ¿Me puedes explicar que está pasando?
-El momento para el que estuvimos preparándonos toda la vida llego, los muertos se han levantado de las tumbas y caminan entre los vivos.
-¿Zombies?...
-Correcto... - hubo un silencio un poco largo.
-Y... ¿Donde está... - la silencie.
-No menciones su profano nombre, esa traidora es una de las causantes.
-¿Entonces quienes... *¬*...
-Aiko... ¡AIKO! ¡reacciona pequeña pervertida! deja de babear... ¬¬
-AJAM ajam... ¿quienes son ellos dos?
-Me presentare si me lo permite joven "mariposa", mi nombre es Illyriel del Coraje, emisaria del cielo.
-(¿Mariposa?)(O///O) Kyaaaaaaa!!! Eres un ángel!! - grito mientras levantaba su cabeza de las piernas del pelo púa, y pegaba una carrera para abrazar al ángel.
-Parece que ya se siente bien... - dijeron todos
-Jeje, muy grata la bienvenida ^-^
-¿Y tu...? - pregunto con curiosidad.
-Astaroth, príncipe demonio. 
-(*suspiro* Nunca cambiaras Luka...) Oye Luka, todavía no había tenido la oportunidad de presentarte a mi espíritu acompañante ¿verdad? ¡Yami-chan! ¿puedes venir? hay alguien que quiero que conozcas.
-¿Que quieres ahora?... - dijo la sensual espíritu.
-¡No me digas que estabas besando otra vez a Amidamaru! - ella bajo la mirada, Amidamaru bajo también la mirada y se dio media vuelta.
-Ejejeje... No, para nada, ¿que te hace pensar eso? - dijo con una risa nerviosa - ¿Hmm...? ¡NO PUEDE SER! Príncipe Astaroth... D:
-¿QUE? ¿Y de donde se conocen ustedes? - dijimos Aiko y yo al unisono.
-¿Me recuerdas tu nombre?... - todos cayeron al suelo ante tal comentario.
-Yami, no te llamaba por él, te llame para que conocieras a mi prima, Luka.
-ES UN PLACER, oh poderoso ángel - dijo Yami ignorándome nuevamente. De pronto empezó a sentirse una aura oscura en la cueva, las luces parecían alumbrar menos...
-...Nadie... ¡¡Me ignora y vive para contarlo!! - un par de esferas de energía aparecieron en cada mano y lo siguiente que todos vieron fue una gran explosión. La siguiente imagen después de esa fue, Yami carbonizada contra un muro, varias personas agarrándose la cabeza contra el suelo. y las caras estupefactas de Illyriel y Astaroth. - Tienes suerte de ya estar muerta... ¬¬ ¿¡Que les parece!?, creo que ya recupere la mitad de todo mi poder ; ) jajaja.
-No se que sera peor... si los fatalities de Anna y Aiko... o esto... (Nota personal: Recordar no ignorar a Luka) - dijo Yoh con una expresión de sorpresa y la típica gota cayendo por la cien.
-Acaso... acaba de decir... ¿que esto solo fue la mitad?... - dijo Yami mientras intentaba reincorporarse.

De pronto llego Ryu entrando con un aire exaltado.

-¡Oigan! Debemos irnos de aquí. Nos encontraron. - dijo Ryu
-¿Quienes nos encontraron Ryu? - pregunto Horo Horo.
-No lo se. Pero alguien nos encontró, y no parecen amigables.
-Son los no muertos, puedo sentir su presencia acercándose
-¿No muertos? ¿De que están hablando? - dijo Horo muy curiosamente. No consiguió respuesta - ¿Por qué siempre me ignoran?
-Poque e mejo ignorate a ti que a Luka - dijo Chocolove en su usual tono burlón.
-¡Muchachos! Tenemos que salir de aquí - grito Yoh a todo pulmón. - Aiko, ¿puedes caminar?
-¿Hum? Si, claro. Vamos.
-Ven Luka, tu seguridad también es importante - dijo Hao sujetándome por el hombro.

Al percatarse Aiko de que Hao se encontraba presente, se sonrojo un poco volteo a mirar en otra dirección, para su sorpresa, en aquella dirección se encontraba el pequeño pelo en punta de ojos dorados, y este al ver el rostro enrojecido de Aiko, también se ruborizo, y bajo la mirada; cumpliendo con el ciclo nuevamente, Aiko volteo a hacia cualquier otra dirección, esta vez hacia Yami, ocurriendo la usual escena de "amistad" Aiko-Yami.

Aiko luego se percato de que Hao rodeaba con el brazo a Luka.

-(>_< ¡A VECES TE ODIO LUKA!) - pensó Aiko para si misma.

Al salir, se veía a una pequeña niña frente a toda una armada de no muertos, y con un gesto, hizo que se nos abalanzara encima la gran masa de zombies. Y así fue como comenzó una batalla a gran escala, Zombies contra Shamanes.

-Aiko, Luka, ¡huyan! - nos gritaron Hao e Yoh.
-No seas tonto Hao, no son gran cosa - dije esto ultimo mientras liberaba una gran carga de energía - Mmm... Interesante, 65%, me estoy regenerando más rápido de lo usual.
-¡Cuidado mi domina! - de pronto dos destellos de luz nos separaron a mi y Aiko, involucrándonos en batallas personales.
-¡Zaebos! ¡Tu! Pagarás por lo que has hecho...

Me concentre en mi ser, y reuní una masiva cantidad de energía. Y la arroje en su dirección; Zaebos retrocedió, se dio la vuelta y se alejo del impacto gracias a un salto; yo le seguí un par de kilómetros hasta que se detuvo.

-¡Zaebos, deja de huir y da la cara! - con mi espada y escudo, ambos en alto intente golpearlo...
-Tsk... esto no esta funcionando, necesito una posesión de objetos para tener alguna oportunidad...

De pronto aparecieron Illyriel y Astaroth en el momento oportuno.

-¿Hum? Hermano, ¿que haces que no acabas con ella?
-¡Yo no obedezco a la ambición de nuestro padre!
-Astaroth no hay tiempo, posesiona mi escudo; Illyriel, posesiona mi espada, necesito sus poderes.
-De acuerdo/Seguro - respondieron.
-Con esta espada sagrada, bendecida por el señor, y manchada con la sangre de los engendros del mal, te castigare por tus pecados, te devolveré al abismo, ¡prepárate para ser purificado con la luz de señor! - Arroje un ataque más veloz, más que veloz, fue como un trueno. Con mucha dificultad logro esquivarlo Zaebos, retirarse y contraatacar, su ataque fue bloqueado por mi escudo sin problemas.
-Con este escudo, manchado por la penumbra del pecado, y purificado por el más sincero arrepentimiento, juro que mientras el señor sea grande, también lo sera el poder de tu propia sangre en tu contra, y absoluta sera su protección de mi ser. - levantando mis espada en alto recite las palabras - En el nombre del poder que el señor me ha conferido, ¡he de cumplir con la profecía!

Mi espada comenzó a brillar con gran intensidad y en un destello de los blanca corrí hacia Zaebos que no sabia ni siquiera lo que le esperaba. Intento apartarse, pero sus pies, se encontraban inmóviles, como pegados, y no pudo hacer reparo en recibir el inminente ataque. De un corte, el demonio cayo al suelo y empezó a quemarse, soltando un gran alarido de dolor...

-¡¡¡Gahhh!!! Mi cuerpo, esta ardiendo, que me has hecho mujer maldita... - deshice mi posesión.
-Esto es por ti... Miku. - hice la estocada final, el infame demonio de la Ira, Zaebos, había muerto.

-Rosa, creo que deberíamos regresar...
-Tienes razón, trabaje muy duro para reunirme con Aiko, no dejare que se me vuelva a perder, ¿Saben hacia donde fueron?
-Se dirigían hacia el norte.
-Muy bien, hacia allá iremos.

Caminamos algunas horas en busca de alguna pista del paradero del grupo, enfrentando zombies y el efecto psicológico de sus gemidos. Pronto alcance a ver a Hao surcar los cielos con su espíritu de fuego, como ya había anochecido, no se veía bien, así que reuní energía en mi mano y le hice señales a Hao, buscando que me viera. Dio resultado y aterrizo cerca de mi.

-Te dije que huyeras, no que te perdieras pequeña rosa. Sabes que eres tan importante como Aiko, no podemos darnos el riesgo de perder a ninguna de las dos.
-Lo se Hao... pero, esto era una lucha personal que tenia que enfrentar por mi misma.
-¿Acaso huiste?, a penas tienes unos pocos rasguños, y no parecen ser heridas de batalla.
-No... todo termino pronto, Zaebos esta muerto...
-¿Muerto? ¿Tu le mataste?
-No, no solo fui yo, Illyriel y Astaroth me ayudaron, sin ellos no habría podido lograrlo.
-Impresionante... Las sorpresas nunca acaban. ¿Quieres que te lleve al nuevo refugio?
-No... quería seguir disfrutando del peligro de caminar casi sola de noche con zombies al asecho... ¡Por supuesto que quiero que me lleves Hao! que preguntas que me haces...
-¿A que esperamos entonces? Sube.

En el camino de vuelta hacia la nueva cueva puse a prueba los conocimientos de Hao sobre la profecía que me involucraba.

-Hao... dime, ¿sabes algo sobre "la roja luna"?
-Lamento no tener respuestas sobre eso, ella es la única dama que no hemos podido ubicar. Como la profecía habla de ninjas, creo que debe estar en Japón, así que mande a Wilfred de vuelta en busca de información.
-Humm... todavía debo encontrar al 2do Demonio arrepentido, ademas de a la propia Luna... Esta no ha sido una tarea fácil.
-Recuerdo que yo también estoy trabajando en el caso, para serte sincero me siento un poco inútil porque no puedo ir directamente yo hasta donde se encuentra el rey demonio y quemarlo, es demasiado poderoso para mí incluso. Así que lo único que puedo hacer es apoyarte mi querida rosa.
-Gracias Hao, sabes que no hace falta que te esfuerces tanto, yo se que nosotras lo lograremos. - dije esto ultimo después de darle un pequeño besito en la mejilla, que hizo que el sonriera un poco.
-Ahora que lo menciona scarlet... yo... soy la segunda demonio arrepentida
-¿Hmm? ¿A que te refieres Illyriel?
-Soy hija adoptiva del señor, nací demonio, pero por mi poderoso sentido de la justicia, pronto fui desterrada del Infierno... Deambule durante siglos en el Limbo, buscando darle significado a mi existencia, y un día de pronto escuche la voz del señor que me hablaba... Me dijo que había pasado la prueba de los 3 siglos de penitencia y que si así lo deseaba, podría convertirme en uno de sus ángeles celestiales... Justo esta es mi primera asignación...
-Whoa... Illyriel, jamás lo habría adivinado por mi cuenta...
-Este asunto se vuelve cada vez más interesante - susurro Hao
-Pero eso hace las cosas más fáciles, ahora no tendré que pelear con todos los demonios con la duda de si estarán arrepentidos.... simplemente los mato y ya... tsk... ¡ahhh! mi cabeza... duele...

(En la mente de Luka)

(En la Mente de Luka)
-*Rugido* ¡Asesinaste a uno de mis hijos! ¡Te haré pagar! ¡Maldita seas rosa, cuando te mate te convertiré en mi esclava en el infierno!
-¡Quiero verte intentarlo!
-¡A su debido momento rosa impaciente! ¡Tengo todo un ejercito para aplastarte insecto! ¿Crees que tendré misericordia? ¡Soy Asmodeo! no me conocen por se misericordioso.
-Ya te lo dije, ¡ven tu mismo a enfrentarme! ni todo tu ejercito junto podrá conmigo.
-¡Tu arrogancia sera tu destrucción!
-Ya veremos quien es más arrogante... ahora, ¡lárgate de mi mente! *coge la mágnum, la apunta y dispara*
-¡¡Gaaaaaaaaaaaaahhh!! Nos veremos otra vez........
-¡Ja! Puedes apostar que si... y la próxima... sera la ultima.

(volviendo a la realidad)

-Luka... ¡Luka! Despierta, ¿estás bien? ¿que rayos te paso a ti y tu demonio? - intentaba despertarme Hao.
-Ugh... ¿ehh? ¿Le paso algo a Astaroth?
-Umm... si, era mi padre, ya sabe que me uní a ti, me estaba reprochando...
-A mi me estaba amenazando.... será mejor que preparemos bien las defensas, tengo el presentimiento de que cuando nos encuentre, nos mandará todo.
-¡Luka! ¡Mira eso! - grito Hao.

En el horizonte, se podía observar la ciudad, y su torre más alta, el US Bank, con una tenebrosa niebla. Al menos ya sabíamos donde buscarlo cuando estuviésemos listos.

Hao descendió...

-Aquí estamos, el nuevo refugio. - hizo notar Hao.
-¡Luka! ¡Entra rápido! Aiko y Fausto están muy gravemente heridos - exclamo Yoh.
-¿¡Queee!? ¿Acaso no tienen ningún medico en el grupo? - exclame alarmada.
-El medico es el mismo Fausto, y él esta inconsciente, todavía respira, pero se esta debilitando. ¿Puedes ayudarnos? - pregunto Yoh mientras corríamos dentro.
-¡Dios mio! Y yo solo conozco de primeros auxilios, si ellos no ven un medico real, no sobrevivirán.
-Luka... Ya me había preocupado cuando nos separaron esos demonios. - dijo Aiko con una voz débil.
-¡Ja! no hay manera de que tu prima muera tan fácil. Oye Aiko... escuche que tienes algunas heridas de gravedad, ¿te encuentras bien?...
-Auch... ejeh... si... algo, pero... el mismo Fausto esta peor herido que yo. Se interpuso entre mi y el ataque de ella... pero... fue demasiado fuerte y también me alcanzó... *cough, cough*
-Esto es mi culpa... *mirada caída* Si no hubiese ido tras Zaebos... esto no les habría pasado... Se acabo, quédate quieta, tratare tus heridas.
-*Se niega con la cabeza* Por favor... trata primero a Fausto....
-No prima, el habría querido que tu fueses tratada primero, eres más importante.
-Ella tiene razón Aiko, deja que te trate. - añadió Yoh.

Luego de un rato de tratar con delicadeza las heridas más pequeñas de Aiko y con un poco de ayuda de Illyriel para sanar la más grave herida que tenia en el torso, procedí hacia el rincón donde estaba Fausto. Él también se encontraba muy mal herido, tenia severas heridas dos veces más grandes que las de Aiko, y además, no habían sido cerradas y estaban completamente abiertas, si acaso habían sido tratadas con antiesceptico para detener el sangrado garrafal que evidentemente había tenido; el hombre respiraba con mucha dificultad, y al preguntarle a Illyriel si podía ayudarle, me dijo que el señor se había negado a sanar las heridas de Fausto por ser un practicante de la oscura arte de la necromancia...

-Bien... ya trate el resto de las heridas, pero... aun queda esa gran herida en el torso, es demasiado grande para aplicarle los tratamientos que conozco, ¡por favor, Illyriel, intercede por él, sus amigos lo necesitan con vida!.
-Ugh... No puedo Luka... La palabra del señor es definitiva para las peticiones de los ángeles... *mirada baja*
-¡Debes estar bromeando!
-No mi señora rosa... pero aguarde, se han dado numerosos casos en los que le niega la petición a un ángel, pero si accede ante sus preciosos hijos.
-¿Quieres decir...?
-Si... quizás el quiere que seas tu quien le reces. 
-(Eres un dios muy caprichoso... No te rezo desde hace años cuando me volví thelemita) Bien... lo haré.

Me arrodille junto a Fausto, cerré los ojos y comencé a orar... por primera vez en muchos años, y todos miraban, lo que me incomodo muchísimo, pero igualmente continué... Luego de un rato, las heridas de Fausto comenzaron a sanar con rapidez, y su respiración volvía a regularizarse; había tenido éxito y el señor había accedido ante mi petición.

-(No cuentes con que te esto se volverá un habito...) Parece que ha sanado... Yoh, Horo, cuiden de él, es su único médico, no les conviene perderlo. - ellos asintieron.
-¡Mi señora! ¡Lo ha logrado, ha sido usted y su poderoso deseo quienes han convencido al señor!
-Seh, seh, Illyriel... lo que digas, vamos, tenemos que revisar afuera que todo este bien. Aiko, tu descansa.

(Afuera de la cueva)

Hao venia detrás de mi...

-No es necesario que me acompañes a hacer guardia. He demostrado que puedo cuidarme sola. - dije conforme Hao se acercaba hasta detenerse a poco menos de medio metro.
-Descuida, eso lo se bien... De todos modos eres muy importante, no quiero que te vuelvas a separar de mi. -*Aiko maldice con todas sus fuerzas dentro de la cueva* - Además no me gusta permanecer tanto tiempo junto a esa bola de idiotas que tiene Yoh por amigos...
-¿Entonces porque has estado con ellos todo este tiempo?
-Porque son amigos también de Aiko, y ella es la mariposa de la profecía...
-Dime la verdad, te atrae la mariposa... - dije en un tono un poco picante.
-Luka, no digas tonterías, no me enamoro desde mi primera vida. Solo es necesario que ella viva para salvar el mundo, así podremos lograr nuestro objetivo. - dijo Hao algo irritado por mi comentario, pero sin ninguna otra expresión que dijera lo contrario.
-Ok ok, lo siento. *mirada baja* - me disculpe, Hao parecía querer añadir algo, pero no le salio. - Fue una noche estrellada como esta cuando todo cambio... Si tan solo... Lo hubiese sabido...
-No es tu culpa Luka, yo también he cometido errores, mis dos reencarnaciones dan fé de ello... Además, fue esa demonio traicionera, te traiciono a ti, y nos dio la espalda a todos y nuestra causa.
-Hao... ¡yo la libere! ella no me encontró a mi... Fue mi poder, el culpable de que ellos ahora estén todos libres...
-Pequeña... No todo lo que paso fue malo, recuerda que ahora tienes a Illyriel, un ángel en quien puedes confiar plenamente.
-Si... un ángel que si me descuidaba me habría "llevado ante el señor".
-Luka ¿sabes cual es tu problema?, estamos en crisis, e insistes en tener una mentalidad pesimista y echarte toda la culpa. No es tu culpa, yo desearía haberlo visto venir, pero esto tenia que pasar, esta escrito en la profecía.
-Tienes razón... ¡Tengo que dejar de culparme por esto y hacer algo!
-Lo bueno es que ya empezaste *sonrie* ya mataste a un demonio, faltan seis.
-¿Seis? creí que eran siete, y uno esta conmigo, ¿no serian cinco, ahora que uno esta muerto?
-No... ¿no viste la pequeña media sangre que ataco a tu prima? Ella es nueva... una niña.
-Mmm... con que nueva, sangre sucia... Ese Asmodeo no ha reparado en indecencias ilegitimas...
-Que disfrute su estadía... porque acabaremos con él para siempre.
-¡Ay, pero que linda se ve la parejita mirando las estrellas! - se escucho una voz desconocida infantil.
-¿Hum, parejita? ¡Un momento! ¡Tu ahí arriba! Identificate. - Hao estaba ligeramente sonrojado, pero la oscuridad de la noche lo ocultó.
-¿Yo? Soy quien le hizo eso a tu amiga la mariposa - dijo ostentando una sonrisa diabólica. - y he venido a arrancarte los pétalos pequeña flor.
-Cuidado Luka, no esta mintiendo, es bastante poderosa...
-Hao... ve por Illyriel y Astaroth, evacua a todos... - le susurre.
-¡Baja y da la cara! - en un destello se poso frente a mi - (tsk...que rápida...)
-¿Que sucede? - exclamaron los seres que se acercaban.
-Illyriel, Astaroth, posesión de objetos.  - dije mientras desenvainaba mi espada.
-Por el poder del señor, ¡arrepiéntete! - dije antes de lanzarme a la carga, para obviamente fallar, mi intención no era destruirla, no allí. Acto seguido me di la vuelta y eche a correr.
-¿Pero que es esto?... ¿Acaso te has dado ya cuenta de la diferencia entre nuestros poderes? - se reía maniáticamente.
-Ven por mi a atraparme, si es que puedes.

Corrí varios kilómetros hasta que Illyriel y Astaroth me informaron, que ya Hao había sacado al grupo de allí y los había llevado a un lugar seguro. Entonces me di la vuelta y le plante cara. Pero entonces, un descuido hizo que una roca que se levantaba en forma de estalactita me hiriera superficialmente en la pierna. Y una serie de estalagmitas más comenzaron a surgir, tuve que moverme con agilidad para evitar el contacto, aun así, algunas me hirieron superficialmente en el torso y brazo derecho. Para evitar seguir siendo atacada de esa manera me aparte del suelo de un salto. Donde me intercepto la niña mandándome de un golpe hacia el suelo lleno de estalagmitas; logre percatarme a tiempo, y de un giro en el aire cambie mi trayectoria para caer en otro lado, surgirían más estalagmitas que quebré lanzando una onda de energía. Nuevamente me impulse, pero esta vez hacia la niña para atacarla, y ella hizo lo mismo, al cruzarnos intente rebanarla con mi espada pero ella habilidosamente giro para pasar sobre ella. En varias ocasiones más intente aterrizar un golpe, sin resultados, y recibiendo algunos golpes de su parte. Nada me libro de sufrir algunos cortes más por las dichosas estalagmitas.

-*pant* Ahora entiendo porque Aiko termino como termino... *pant* ¿Quien rayos eres?
-Ahora entiendo como es que mataste a Zaebos, verdaderamente eres fuerte, simplemente no lo suficiente. Me llamo Shia, nací hace algunas semanas. Soy mitad humana, mitad demonio.
-Pero... *pant* Si no eres una demonio pura, ¿como es que eres tan fuerte? - dije tratando de distraerla mientras deshacía la posesión de mi espada.
-Jijiji... *una flecha de luz le atraviesa el torso* Ugh... Tu... maldita, eres lista... - dijo esto antes de irse.
-*pant* Gracias Illyriel, lo has hecho genial...
-Eso no sera suficiente para matarla
-Lo se... pero la alejará de nosotros por un tiempo.
-Señora, esta herida...
-Descuida, son superficiales, aun puedo caminar, solo estoy cansada... Vamos, hay que reunirnos con el resto...

Caminamos durante unos 15 minutos más hasta que caí al suelo por el cansancio y la heridas que la batalla habían dejado... De pronto, unos 20 zombies se nos abalanzaron encima, y por el extremo cansancio no manipule mi espada de larga hoja, en vez de eso, desenfunde el par de pistolas mágnum que había encontrado en aquella casa, ambas estaban cargadas con 6 balas calibre .50 cada una, y dispare a los agresores, pero seguían atacando más zombies, retrocedí contra una piedra y seguí disparando, hasta que las balas se terminaron, y aun quedaban 8 zombies...

-No puedo creer que todo vaya a terminar así... - dije resignada, pues, no podía recargar tan rápido. - el mundo se acabara porque Luka fue devorada por simples y vulgares zombies...
-¡Estas hablando demasiado rápido! - dijo alguien antes de aparecer el puño enorme del espíritu de fuego, aplastando los zombies restantes.
-¡Hao! No sabes cuanto me alegra verte... *pant* Fuiste muy oportuno.
-Siempre estaré ahí para cuidarte pequeña flor.
-Creo que estas exagerando demasiado con los cumplidos... No importa, llévame con el resto.
-Luka... estas herida.
-Descuida, estoy bien, es solo superficial.
-Bien, ¿puedes subir? - dijo mientras me ofrecía la mano.
-Claro, te dije que no es nada.

(En camino al nuevo refugio)

-¿Y bien... la mataste?
-No... era demasiado fuerte... solo conseguí herirla gravemente. No nos molestara por un buen tiempo.
-Ya veo... el nuevo sitio es un bosque.
-Perfecto, así no podrán vernos aunque pasen volando. ¿Todos están bien?
-Si, evacuaron sin peligro alguno.

(En el bosque)

-Hemos llegado.
-¡Hola Lukaaaa! Kyuuu... - dijo Aiko mientras corría a abrazarme.
-¿Hum? Veo que el tratamiento te ha sentado bien, ya tienes energías para moverte.
-Siii... ¿Que te paso? Hao tan pronto nos dejo aquí se fue nuevamente, y se negó a dar respuestas.
-Una pequeña demonio llamada Shia ataco, y yo la enfrente... y le pedí a Hao que los llevara a un lugar seguro. Luego un grupo de zombies me ataco antes de encontrarme con Hao.
-Shia... y... ¿lograste matarla?... - dijo con la penumbra en sus ojos.
-No... solo pude herirla severamente antes de que huyera... Hao, por favor cariño, dile al resto que estaré a la orilla del rió y no quiero que nadie me moleste. - dicho esto me di la vuelta y me largue a descansar y sanar mis heridas. La palabra "cariño" le apuñalo el alma como filosos cuchillos a Aiko, si Shia no me había matado, ahora ella quería hacerlo.
-Pero Luka... tus heridas. - pregunto Hao.
-Son superficiales, sanaran solas, no es nada.


---------- Y LA AMENAZA CONTINUA -----------

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